El componente clave de los transmisores de presión de Trafag son los sensores de presión basados en la tecnología de película fina sobre acero (diseño totalmente soldado sin junta tórica). La tecnología del sensor procede de la propia producción de Trafag y se desarrolló internamente junto con el ASIC (microchip de aplicación específica) a medida para el procesamiento de la señal del sensor. Como resultado, el sensor de presión y la electrónica trabajan en perfecta colaboración y alcanzan un nivel único de estabilidad y fiabilidad a largo plazo, incluso en las condiciones ambientales más adversas.

Para cumplir los requisitos específicos del hidrógeno para la medición de la presión, como la fragilización y la permeabilidad, Trafag calificó una aleación de acero especial para sensores de presión en contacto con hidrógeno.

Esta aleación de acero específica, un acero austenítico reforzado con nitrógeno, es compatible con el hidrógeno y posee todas las propiedades necesarias para fabricar sensores de presión robustos, precisos y estables a largo plazo.

La ilustración muestra las características clave del transmisor de presión Trafag que lo hacen adecuado para aplicaciones de hidrógeno móviles y estacionarias, como pilas de combustible, electrolizadores, compresores y depósitos de almacenamiento. Además de estas características del producto, también se requieren determinadas certificaciones para su uso en aplicaciones críticas. Todos los transmisores de presión de hidrógeno Trafag cuentan con la certificación EC79 y, para determinados modelos, también están disponibles las aprobaciones ATEX/IECEx y/o marina.

• Certificado EC79 para vehículos impulsados por hidrógeno
• ATEX/IECEx para zonas Ex 0, 1 y 2
• Aprobado para aplicaciones marinas