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Detectores de humo
Los detectores de humo modernos suelen estar equipados con funciones adicionales, como batería de reserva, conectividad inalámbrica y tecnologías inteligentes. Los detectores de humo conectados de forma inalámbrica pueden comunicarse entre sí, lo que permite que la señal de alarma se propague por todo el edificio. Los detectores de humo inteligentes pueden vincularse a una aplicación móvil, lo que permite a los usuarios recibir notificaciones a distancia y supervisar el sistema.


Detectores de humo

La mayoría de los detectores de humo utilizan una o varias tecnologías de detección, como la ionización, la óptica o la térmica. Los detectores de humo por ionización utilizan una pequeña cantidad de material radiactivo para crear un circuito. Cuando entra humo en la habitación, este circuito se interrumpe, haciendo sonar la alarma. Los detectores de humo ópticos utilizan una fuente de luz y un sensor de luz. Cuando las partículas de humo entran en el aire, dispersan la luz, que es detectada por el sensor y activa la alarma. Los detectores de humo térmicos reaccionan a los cambios de temperatura provocados por el fuego y activan la alarma cuando la temperatura aumenta rápidamente.

La colocación de detectores de humo en lugares estratégicos de un edificio es esencial para una protección eficaz contra incendios. Los lugares típicos son los pasillos, los dormitorios y otras zonas en las que suele haber gente. Se recomienda instalar al menos un detector de humo por planta, preferiblemente cerca de los dormitorios.